Cuando los conejitos son muy jóvenes es difícil saber si son machos o hembras. Incluso especialistas se pueden equivocar porque el sexo en edades muy tempranas no está muy bien definido y las diferencias entre macho y hembra son muy leves. A partir de las 6-8 semanas las diferencias se empiezan a hacer más evidentes. Cuanto mayor es la edad más fácil es determinar el sexo de un conejo.
La manera más eficaz de saberlo es valorando la distancia ano-genital (la distancia que hay entre el ano y los genitales) que, como veremos a continuación, es menor en las hembras que en los machos.
Para saber si un conejo es macho o hembra (sexaje) colocaremos suavemente a nuestro nuevo compañero con las patas hacia arriba, al final de la barriga, antes de llegar a la cola, observamos dos orificios: el más cercano a la cola es el ano y el otro es el orificio genital, el cual esconde el pene en el caso de los machos o la vulva en el caso de las hembras. Presionando suavemente en la zona anterior a este orificio, conseguiremos que exteriorice una protuberancia redondeada (pene) o bien quede una hendidura alargada (vulva).
Si tienes dudas, lo mejor es acudir a un médico veterinario especialista en exóticos.